Twitter del autor

Tumblr del autor

Translate

viernes, 25 de enero de 2019

Flatliners 2017


Allá por 1990, el señor Joel Schumacher nos traía la versión original de esta película de suspenso y terror siendo hasta el día de hoy una de las mejores cintas del director y hasta se puede decir que para muchos, la original Flatliners es un clásico. En 2017, el director Niels Arden Oplev, el cual tiene películas más que interesantes, nos trae esta remake. Lamentablemente esta versión de 2017 deja muchísimo que desear y se olvida incluso a medida que la vamos viendo.

Línea plana del 90

La premisa de la película es sin dudas más que intrigante y original. Un grupo de estudiantes avanzados de medicina tienen en común una gran curiosidad cuasi mórbida con las experiencias relatadas por aquellas personas que han estado muertas algunos minutos. Esta curiosidad los hará tratar de tener evidencias científicas sobre estas experiencias y deciden hacer el experimento en el que uno de ellos morirá para ser resucitado por el resto y así, tener experiencias del más allá de forma más empíricas. Así, la peli original nos entregaba de muy buena manera a un grupo disímil pero con esta gran cosa en común que los unía. Aquellos estudiantes encarnados de muy buena manera por Kiefer Sutherland, Julia Roberts, Kevin Bacon, William Baldwin y Oliver Platt eran personajes bien definidos, eran todos brillantes y con unos porqués realmente entendibles. Luego la película se tornaba en el campo del suspenso y el terror cuando estas experiencias aparecían en el día a día con consecuencias graves en alguno de los casos.

A todo esto, la peli original trataba de forma directa no sólo estas experiencias de la vida real, sino también temas como la culpa, la redención, la fraternidad, las exigencias profesionales y personales que los humanos nos ponemos y hasta dónde llegamos para "complacerlas".

Las actuaciones si bien no eran una maravilla, estaban bien, y el guión cuidaba muchos detalles teniendo momentos bastante terroríficos que se plasmaban con efectos de forma práctica, como se hacían las cosas en aquella época. Las circunstancias que ponían a los personajes en cada situación eran creíbles y hasta emocionales en algunos momentos. Uno no dudaba del por qué pasaban las cosas que pasaban e incluso la premisa final de la película, se entiende y se aplica correctamente. La música estaba bien y el uso de cámara y la ambientación era muy buena. En ningún momento uno se aburría viendo la cinta de 1990 y en particular quien escribe incluso la vio varias veces y hasta el día de hoy, la película se mantiene en todos sus aspectos.

2017, línea plana plana

Todo aquello que tenía de bueno la película original, esta remake hace todo lo contrario. Las actuaciones son pésimas (incluso Ellen Page no brilla casi), se vuelca a efectos especiales modernos y rebuscados, la historia tiene serios agujeros argumentales y uno nunca se cree por qué están haciendo las cosas que hacen los personajes. Además, dicho de paso, la música es muy mala.

Esta nueva versión tiene básicamente la misma historia, intenta dar los mismos mensajes, intenta hasta imitar algunos personajes de la original e incluso tiene a Kiefer Sutherland en un papel sin trascendencia que bien podría haber sido el personaje de la original y le hubiera dado un plus a esta remake. Nada de lo que intenta esta cinta lo logra lamentablemente. Lo único que está bastante bien son los momentos de terror, o alguno de ellos, pero por desgracia son pocos y las casi dos horas de cinta se van en situaciones tontas, terribles errores de continuidad y narrativos, incongruencias, hachazos volando en la sala de edición y baile, sí, así como lo lee, los tipos acaban de hacer un experimento y volver de la muerte y no discuten científicamente la experiencia, no, ellos se van de parranda a bailar y gritar fuerte en escenas altamente nauseabundas que a uno lo resetean en lo que está intentando ver.

Además, salvo dos personajes, los demás que están involucrados en este experimento son estudiantes de pésimo a regular. O sea, la persona que te va a revivir no sabe cómo hacerlo, nunca entubó a un paciente, no sabe qué droga administrar ni en qué casos, etc. Realmente el guión nos está diciendo que la estudiante que quiere hacer este experimento, no quiere rodearse de personas que la ayuden, quiere rodearse de aquellos compañeros que son rebeldes o que no les importa estudiar. Bueno, quizá entonces en este caso estamos hablando de que el personaje lo que quiere realmente es morir... ¿no encontró mejores formas que molestar a sus colegas en reuniones clandestinas en un sótano mágicamente equipado no sólo con todo lo necesario si no que con un hospital entero? Este tipo de errores y detalles molestos abundan en la película pero no se preocupe querido lector, el mismo guión se encargará de contradecirse y todo lo que estos malos estudiantes aprenden sobre la marcha matando y reviviendo uno de sus compañeros, será contradicho con el próximo.

Lamentablemente esta remake desaprovecha una historia más que interesante volviéndose una película más que olvidable del montón. Ejemplo de cuánto se olvida fue que en un momento de visiones terroríficas nombran un personaje y mi mente se fue desesperadamente a tratar de adivinar a quién habían nombrado. La respuesta vino más tarde en la película y a ese personaje que habían nombrado era quien estaba en pantalla en ese momento. Si si, llamaban de forma tenebrosa al único personaje en pantalla y no recordaba su nombre, o directamente no lo habían dicho. Bueno, más tarde otro personaje le habla a este y ahí me di cuenta de quién era. Sin duda alguna la peli atrapa (guiño).

Conclusión

De más está decir que esta remake innecesaria no merece la pena en casi nada. Sí saludo la mayoría de los momentos de terror ya que están muy bien y siempre es bueno ver a la querida Ellen Page. Por lo demás, vea la original si quiere que va a usar mejor el tiempo.

No hay comentarios: