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viernes, 20 de noviembre de 2020

Crawl (AKA "Cómo convertirse en un torniquete humano")

Crawl, también llamada Cómo convertirse en un torniquete humano, es una película de 2019 dirigida por Alexandre Aja, conocido director francés principalmente volcado al suspenso y terror de cuyas películas por lo general se sale bien parado. Aunque esta no es la excepción, la película tiene serios problemas de inverosimilitud.

La trama

La historia se centra en una familia, dos hermanas distanciadas y un padre algo ermitaño, duro, estricto, exigente y también distante. Debido a la inminente llegada de un huracán, una hermana le pide a la protagonista interpretada por Kaya Scodelario que vaya a chequear al padre de ambas ya que no se pueden comunicar por teléfono. El padre (Barry Pepper) se encuentra en pleno pasaje del huracán por lo que allí ya tenemos una urgencia de tiempo.

Como se ve en el trailer, el padre se encuentra herido en el espacio bajo su casa con, oh sorpresa, Alligator(s) al asecho. Ahora bien, que sean Alligator y no cocodrilos en nada incide ya que a diferencia del tamaño su comportamiento y peligrosidad es similar que es lo que importa, pero es bueno aclarar. La hija entonces deberá lidiar con los hermosos animales, su padre "algo" herido, el agua que va invadiendo cada vez más la casa y el lugar, y el perro de la familia que por ningún motivo específico entra en la ecuación.

La película maneja muy bien el espacio reducido y la tensión ya que además de que estos animales son amos del asecho, el subir del nivel del agua hace que cada vez los animales puedan moverse con más libertad por el lugar. Incluso el comportamiento de los animales en ningún momento nos parece forzado, inadecuado o estigmatizante. Hay un por qué están estos cocodrilos ahí, hay un por qué están algo a la defensiva y en ningún momento se los trata de ver como "devoradores de hombres" ni nada de eso.

A esto se acompaña con bastante buenas actuaciones sobre todo de la protagonista y con un sonido y ambientación muy buenos. Los efectos están bien logrados con varios momentos que lo sorprenden. De las pocas películas que el jump-scare está justificado ya que los cocodrilos atacan así, de sorpresa.

Los problemas (o también) Padre: tú puedes vencerlos! Hija: mis polainas!

Ahora bien, hay dos detalles principalmente inverosímiles que lamentablemente lo obligan a uno a desconectarse y pensar "bueno, es una película". Digo lamentablemente porque el resto de la película está muy bien, mantiene el interés en todo, el ambiente de huracán está espectacular, los animales están muy bien logrados y hasta el drama familiar es rápido en tiempo para que no moleste tanto. Drama familiar que, si se me permite, podría ser mucho más elaborado e incluso jugar un papel importante en la película pero se cae en el clásico berrinche de ¿por qué eras distante y exigente?

Pero volviendo a lo inverosímil. Sin dar spoiler porque se ve en el trailer, los animales atacan, y muerden, y muerden más de una vez a los dos, padre e hija, pero para el bochorno del guionista, todo se soluciona con un torniquete, y remarco todo. Esto no sólo tiene el problema del torniquete, sino que para empezar, cualquiera que haya visto un documental sobre cocodrilos sabe que la fuerza que tienen en la mandíbula, el poder de mordida, es uno de los mayores en todo el reino animal, difícilmente un cocodrilo suelta a la presa y el ataque es tan rápido que no da tiempo a nada. Además, sabido es que sobre que muerde, un cocodrilo rueda y sacude, ocasionando que todos los huesos se rompan y en el mejor de los casos para la víctima te arranque un buen trozo. Bueno, esto lo solucionaremos con un buen torniquete y problema resuelto, hasta podré correr, saltar, hacer fuerza y nadar.

Lo segundo es justamente el nado. Me explico, la protagonista es aparentemente una nadadora de competición, cuyo padre exigente llevó al límite siendo una niña, hoy sus tiempos no son los mejores. Bien, pues en la película se insinúa que la muchacha puede superar y hacerle zig-zag a un cocodrilo. Por supuesto estos nos salta en rojo a nosotros como espectadores, vuelvo a decir, quien haya visto un documental sabe que los cocodrilos son muy rápidos en el agua además de muy hábiles a la hora de cambiar de rumbo. No contento con esto, y para algo existen las estadísticas y Google, inmediatamente buscaremos información para saber que el récord de nado profesional es de 8,6 km/h mientras que un cocodrilo promedio (alligator también) maneja una velocidad en el agua que ronda los 30 km/h. Matemática básica de superviviente. Inverosímil es poco.

Concluyendo

Salvando estos "demasiado grandes para salvar" problemas que tiene la película, el resto está más que bien y lo van a entretener mucho, con buen suspenso, actuaciones bien, y sobre todo muy buen sonido y ambientación. La película no es mala para nada, no es lo que se espera, es muy entretenida, tiene escenas realmente buenas y hasta posiblemente la vea más de una vez. Eso sí, va a tener que tragarse esos dos bocados muy grandes si quiere sobrevivir a Crawl.